Por: Jorge Vega Hace unos meses trabajé con mis estudiantes de francés un cuento del escritor chileno Luis Sepúlveda. El título era Le Dernier Fakir (El último Faquir). El cuento habla sobre la amistad entre dos hombres; uno era el ¨proyecto¨ de faquir y el otro hombre era su, como él mismo se autoproclama, mejor amigo. La historia es, según yo, muy conmovedora y realmente me impresionó mucho el final. Pero en esta ocasión no quiero hablar sobre la historia precisamente, sino sobre la enseñanza de haber trabajado este cuento con mis estudiantes. Cuando leí el cuento por primera vez pensé que no podía guardármelo para mí mismo y pensé que como a mí me había gustado y emocionado, seguramente pasaría lo mismo con mis estudiantes, pero no fue así. El día de la clase mientras leíamos el cuento y tratábamos de entender, los estudiantes no mostraban el mismo entusiasmo que yo, era claro que yo esperaba que causara el mismo impacto que en mí y por eso les pregunté repetidas
Francia y Nicaragua