Por:
Jorge Vega
He
hecho muchas cosas en mi vida profesional, desde enseñar francés o
español como lengua extranjera, trabajar en una mediateca, ser
coordinador pedagôgico entre otras. Cada actividad con su
satisfacciôn y enseñanza, pero una de las que mâs satisfacciones
me ha dado, fue la de ser locutor de un programa de radio.
Siempre
me ha gustado todo lo que tiene que ver con los medios de
comunicaciôn y pues he tenido la suerte de hacer radio, un poco de
televisiôn y he escrito también ciertos artîculos de opiniôn para
los periôdicos de Nicaragua y para el semanario La Brûjula, que
dejô de existir hace varios años.
Como
tengo el gusto y placer de comunicar y como ese arte se me da con
facilidad, por eso decidî empezar con este blog y ya llevo varios
años escribiendo diferentes tipos de entradas que tienen que ver con
mi cotidianidad, con mi manera de ver las cosas, con lo que me rodea,
con los lugares y los tiempos que vivo, en fin, es un reflejo de mî,
pero en negro sobre blanco o plasmado en papel.
Del
programa de radio tengo muy buenos recuerdos, aunque tengo que
confesar que los primeros programas eran pre-grabados y que me daba
miedo ver la luz encenderse, porque sabîamos que a partir de ahî se
tenîa que tratar de hacer todo de la forma mâs correcta posible. A
mî que me gusta hablar, cuando veîa que la luz roja se encendîa y
que era el momento de empezar a hablar me quedaba paralizado, era el
temor a equivocarse y saber que afuera habîa un montôn de gente
disponible 24/7 para hacer criticas gratuitas.
Todo
lo que uno dice en la radio, televisiôn, blog, en resumen en los
diferentes medios de comunicaicôn, dejan una puerta abierta a una
barra libre de comentarios y criticas y al comienzo puede ser difîcil
lidiar con eso.
Con
el tiempo el programa de radio se nos hizo mâs fâcil de programar,
organizar y de animar y los guiones mâs fâciles de elaborar y ya
para ese tiempo podîamos hacer uso de la naturalidad e
improvisaciôn.
En
los no sé cuântos programas que hicimos, tuve la oportunidad de
entrevistar a muchîsima gente y aprender muchîsimo sobre ellos. Le
agradezco a todos los invitados que tuvimos y en particular a la
Alejandra De Franco, con quien organizaba, programaba y locutaba el
programa de radio, por haber compartido conmigo ese “nuestro viaje”
en el variado mundo de la radio. Siento que ambos aprendimos mucho y
siento también que hacîamos un buen equipo!