~Jorge Vega
El
gobierno actual de Nicaragua nos ha ido acostumbrando poco a poco a
agachar la cabeza, la gente simplemente debe obedecer, seguir las
órdenes de “arriba”, no se puede criticar al “buen gobierno”
y siempre hay que decir que es eso: un buen gobierno. Ellos
nos han enseñado que es indispensable decirlo todo el tiempo y que
si algo no funciona, es culpa de cualquier otro, menos del “buen
gobierno”, ¿ Cómo puede ser culpa del gobierno si es bueno? Si
algo malo aparece, tiene que ser obligatoriamente de algo externo.
Esta sumisión de parte del pueblo, la Chayo y Ortega la han ido
consiguiendo al suave con su pan y circo. ¿Por qué les funciona?,
porque hay una población joven y necesitada muy grande en el país y
pues un joven quiere divertirse con el fútbol o con conciertos y eso
es lo que reciben.
La
Chayo ha podido instalarse a su gusto y antojo y no necesita
justificarse por las cosas que hace. El mejor ejemplo que tenemos es
su decoración metálica. Los fue poniendo de uno en uno, de poquito
a poquito y recibió pequeñas burlas y críticas de parte de una
población tímida y con miedo. ¿Qué hizo la Chayo?, pues seguir
poniendo sus decoraciones metálicas y ya no de uno en uno, porque no
necesitaba hacer las cosas al suave, porque la población ya le había
dado la “autorización” para hacerlo. ¿Cómo le dimos la
autorización?, pues al no haber hecho nada mientras ella nos
decoraba el país a su gusto y antojo.
En
resumen, la estrategia del gobierno consiste en “ganar”+ “ganar”:
el gobierno te construye un parque, lo cual es una obligación y
existe un presupuesto para eso, te dice que fue un parque hecho por
el “buen gobierno”, hacen un rótulo donde aparece la imagen de
las buenas personas (ellos dos obviamente), provocando así el culto
a la imagen y en cambio utilizaban el mismo dinero y la
“aceptación” silenciosa del pueblo, para seguir construyendo e
instalando su decoración de metal.
¿Por
qué necesita tanto ese símbolo la Chayo?, porque
independientemente que su decoraciones de metal sean bonitas o no,
esotéricas o no, bien vistas o no, en resumen, ella las necesita,
porque esa es su marca, es su símbolo, es su manera de
decirle a la gente que la persona que tiene el poder es ella.
Nadie
nunca va a asociar esas decoraciones metálicas con Sandino o con
Ortega, no, esas decoraciones son el símbolo de ella, de la Rosario
Murillo, símbolos ostentosos que muestran su poder y sus ganas de
más poder. Ella está decorando así a Nicaragua, porque Nicaragua
es su casa, el país le pertenece, entonces puede hacer eso y más,
puede hacer todo, porque es más cristiana que los cristianos, más
socialista que cualquier socialista y más solidaria que cualquier
otra persona real o imaginaria.